La música en mi es un detonador emocional y sexual. El concierto de Muse me dejó extasiada. Contarles lo que Cornell causa en mi es tema de otro post. La cosa es que desde ese fantástico concierto, sexualmente andaba ansiosa. Y digo andaba, porque Bad Religion y el barista 1, lograron convertir el verbo en pasado.
Estaba emocionada por ir al concierto, en teoría me regalarían tickets, lo que no sucedió, pero no iba a dejar de verlos, no otra vez. Así, que me moví para obtener uno, ya no me importaba si “*buxito” (barista 1) iba conmigo o no. Para nuestra suerte, obtuve dos.
La octava rola, Infected, de mis favoritas me elevó a otro nivel, sólo cantaba y saltaba. De la nada, ¡madres! que me besa. Y pues ya que, compartimos saliva. Después un par de drinks,… pues me puse más accesible. Punk Rock Song, parecía que repetiría la escena, pero fue más que eso, ni cuenta me di cuando la rola terminó, para Sorrow yo ya estaba entre la pared y “*buxito”.
Terminamos en un hotel, que un cuate frecuenta cuando vamos al Bull y consigue chica. Y siempre insiste, que es idóneo para ello: limpio, discreto y de buen gusto. Y pues llegamos, al lugar citado.
Lo curioso de todo es que él pensaba, que él había salido de cacería y ya tenía a su presa en la cama. ¡Sorpresa! Quien escogió fui yo, yo quería tirármelo desde que me preparó mi chai. A pesar de la edad tiene experiencia el chamaco, acepto que se esmeró, le echo ganas y más cuando me desconcentré cuando la música ambiental dio un giro de rock a pop, pero el seguía acariciando y susurrando al oído, logrando que mi excitación y placer volvieran al ritmo que anterior. Fue un coito de 8 puntos, por la variante de la música.
La plática post-coito, dejó al descubierto que tiene novia… jajajaja। Los hombres con novia, buscan coito con otras mujeres, para convencer al mundo de su virilidad. Seguramente, volveremos a compartir una cama. ¿quién saldrá de caza la próxima vez?
Estaba emocionada por ir al concierto, en teoría me regalarían tickets, lo que no sucedió, pero no iba a dejar de verlos, no otra vez. Así, que me moví para obtener uno, ya no me importaba si “*buxito” (barista 1) iba conmigo o no. Para nuestra suerte, obtuve dos.
La octava rola, Infected, de mis favoritas me elevó a otro nivel, sólo cantaba y saltaba. De la nada, ¡madres! que me besa. Y pues ya que, compartimos saliva. Después un par de drinks,… pues me puse más accesible. Punk Rock Song, parecía que repetiría la escena, pero fue más que eso, ni cuenta me di cuando la rola terminó, para Sorrow yo ya estaba entre la pared y “*buxito”.
Terminamos en un hotel, que un cuate frecuenta cuando vamos al Bull y consigue chica. Y siempre insiste, que es idóneo para ello: limpio, discreto y de buen gusto. Y pues llegamos, al lugar citado.
Lo curioso de todo es que él pensaba, que él había salido de cacería y ya tenía a su presa en la cama. ¡Sorpresa! Quien escogió fui yo, yo quería tirármelo desde que me preparó mi chai. A pesar de la edad tiene experiencia el chamaco, acepto que se esmeró, le echo ganas y más cuando me desconcentré cuando la música ambiental dio un giro de rock a pop, pero el seguía acariciando y susurrando al oído, logrando que mi excitación y placer volvieran al ritmo que anterior. Fue un coito de 8 puntos, por la variante de la música.
La plática post-coito, dejó al descubierto que tiene novia… jajajaja। Los hombres con novia, buscan coito con otras mujeres, para convencer al mundo de su virilidad. Seguramente, volveremos a compartir una cama. ¿quién saldrá de caza la próxima vez?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario